jueves, 6 de enero de 2011

Bautismo del Señor (A)

9-1-2011 BAUTISMO DEL SEÑOR (A)

Is. 42, 1-4.6-7; Slm. 28; Hch. 10, 34-38; Mt. 3, 13-17



Homilía de audio en MP3

Queridos hermanos:

Aunque hace ya algún tiempo prediqué sobre los ritos del sacramento del Bautismo y su significado, nunca está de más el repetir hoy lo ya dicho:

- Escrutinio. En esta parte se les pregunta a los padres y padrinos qué desean para los bautizandos (el Bautismo) y si están dispuestos a educarlos en la fe cristiana de amar a Dios, al prójimo y a los mandamientos tal y como se nos enseña en los evangelios. Luego el sacerdote hace sobre la frente de la criatura la señal de la cruz (asimismo los padres y padrinos) como signo de su aceptación en la Iglesia y de la salvación de Cristo sobre dichas criaturas.

- Exorcismo. Después de las lecturas y del sermón, el sacerdote invoca el poder de Dios para que libre a las criaturas del poder de Satanás, para que los arranque de las tinieblas para la luz, para que los libre del pecado original y los haga templo del Espíritu Santo.

- Unción. Se dice a los padres que descubran el pecho de las criaturas para que el sacerdote los unja con el aceite de los catecúmenos, que ha sido bendecido por el obispo en la Misa Crismal. En las luchas griegas de las olimpiadas los deportistas se ungían con aceite por todo el cuerpo para estar más ágiles, para tener los músculos más distendidos y estar más resbaladizos para sus contrincantes. En definitiva, se ungían para luchar mejor; pues así sucede con esta unción con la que la Iglesia prepara a sus hijos, ya que la vida de fe es una vida de lucha (“Esforzaos en entrar por la puerta estrecha…, porque es estrecha la puerta y angosto el camino que lleva a la vida, y son pocos los que lo encuentran” [Mt 7, 13-14]).

- Bendición del agua. El sacerdote bendice el agua con la que a continuación serán bautizadas las criaturas. Agua que significa limpie­za (que nos purifica de nuestras suciedades), agua que es fuente de vida (pues sin ella los frutos no pueden crecer), pero también agua que es fuente de muerte (que puede arrasar, como el Tsunami de las Navidades de 2004, y de tantas otras ocasiones, recientemente por Andalucía y Australia) y agua que arrasa nuestros pecados. Vemos esto en la oración de bendición del agua en donde se recuerda el diluvio universal. También en la oración se recuerda el paso del pueblo de Israel por en medio del mar Rojo. Así, se simboliza que Israel pasó de la esclavitud a la libertad a través del agua. Luego se recuerda el paso del desierto a la tierra prometida a través del río Jordán. De este modo se simboliza el paso desde el desierto, lugar de sed-calor-peligros a la tierra prometida en donde Dios nos espera; etc.

- Promesas y credo. Los padres y padrinos en nombre de las criaturas, que entonces no pueden hablar por sí mismas, si tienen pocos meses de vida, prometen a Dios y ante la comunidad eclesial que desean rechazar el pecado y todo lo que conlleva de alejamiento de Dios y del prójimo. Igualmente se confiesa la fe en Dios Padre, en Dios Hijo, en Dios Espíritu Santo y en la Santa Iglesia de Dios. Si falta uno de estos elementos o no se acepta, entonces quiere decir que no se puede seguir adelante con el Bautismo, pues no tiene sentido bautizarse en una fe que no se acepta, entrar en una Iglesia que no se acepta.

- Bautizo. Se puede hacer de tres modos: 1) Sumergiendo la criatura en el agua. Así, mediante la inmersión, era cómo bautizaba primeramente S. Juan Bautista. He visto algún cuadro en donde S. Juan con una concha echaba agua sobre la cabeza de Jesús y de este modo lo bautizaba, pero nada más lejos de la realidad. Más bien se acercaba la gente, S. Juan estaba en medio del río y sujetando a uno por los hombros o por la cabeza le introducía entero debajo del agua. Así es como hicieron los primeros cristianos sumergiendo a los que iban a ser bautiza­dos por tres veces; de este modo simbolizaban las tres personas de la Santísima Trini­dad y los tres días que Jesucristo estuvo enterrado en el sepul­cro hasta que resucitó. Y esto podía hacerse en un río o en una piscina. Incluso ahora algunos grupos cristia­nos bautizan hoy día a sus hijos de este modo. 2) Otra forma de bautizar es utilizando la aspersión con un hisopo, cuando hay una gran cantidad de gente para bautizar. Se dice que S. Francisco Javier en la India bautizó en un solo día a 10.000 personas de este modo. 3) Y el último modo de bautizar es el comúnmente conocido por echar agua sobre la cabeza del bautizando por tres veces mientras se dice la fórmula: "N., yo te bautizo en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo."

Normalmente para bautizar se utiliza el agua; por eso deci­mos que hay Bautismo de agua, pero igualmente existen otras dos clases de Bautismos: el de sangre y el de deseo. El de sangre es el de aquella persona que, queriendo ser cristiano y estando preparándose en doctrina cristiana para recibirlo, resulta que antes de ello acontece una persecución contra los cristianos y él, pudiendo librarse, se presenta voluntariamente al suplicio y lo matan. El derramamiento de su propia sangre sobre su cuerpo es su mismo Bautismo (Santos Inocentes, primeros bautizados). El Bautismo de deseo es de aquel que se encuentra en la misma situación que el anterior -se está preparando en la doctri­na cristiana para ser bautizado- y resultando que tiene una enfer­medad o situación de peligro accidental que lo lleva a la muerte, y no teniendo a nadie que lo bautice al morir, confiesa interior­mente su deseo de ser cristiano, su fe en Jesucristo y por este mismo deseo es bautizado.

- Crismación. Con aceite bendecido por el obispo se unge en la coronilla al recién bautizado y queda constituido sacerdote (está capacitado para comunicarse con Dios y ser intermediario para otros ante Dios), profeta (puede hablar a los demás de parte de Dios y recibir de El su palabra) y rey (está llamado a reinar con Cristo en el Reino de los cielos).

- Vestidura blanca. Es el alba que se ponen los sacerdotes, obispos, diáconos, o monaguillos en las celebraciones. Es una vestidura propia de todo cristiano, y no sólo de los clérigos. Esta vestidura blanca significa la limpieza de los pecados personales y/o del pecado original.

- Vela. Se coge el fuego únicamente del cirio pascual (no de un mechero o cerilla cualquiera), que representa a Cristo resucitado.

- Effetá (ábrete). Lo mismo que Cristo hizo oír a los sordos y hablar a los mudos (les tocaba según los curaba), así el sacerdote toca los oídos y la boca de la criatura para que, a su tiempo, pueda escuchar la Palabra de Dios y pueda hablar con El y de El.

- Ofrecimiento a la Virgen. Este rito no está en los libros litúrgicos, pero muchos sacerdotes lo hacemos. Al terminar la ceremonia ofrecemos a los recién bautizados a la Virgen María para que ella ejerza como Madre suya durante toda la vida.

Espero que estas palabras sirvan para conocer mejor este sacramento tan importante en nuestra vida de fe.

10 comentarios:

  1. Estimado Andrés, esto no es una homilía sino una explicación del sacramento del Bautismo. El bautismo de Jesús es un hecho fundamental pues, se coloca en la fila de los pecadores para enseñarnos, con humildad, que está de nuestra parte para ayudarnos en la superación del pecado. Cuánta razón tenía San Pablo cuando dijo: "siendo de condición divina, no codició el ser iguala Dios, sino que se despojó de sí mismo tomando condición de esclavo" Qué hermosa lección nos da Jesús en el Jordán. Está de nuestra parte, nos ama, quiere ayudarnos a superar el pecado, quiere ayudarnos a ser santos... Tomó nuestros pecados para redimirnos... Por eso el bautismo nos hace hijos de Dios para que seamos suyos, y nos hace miembros de la Iglesia... Bendiciones.

    ResponderEliminar
  2. Gracias por tu homilía Andrés, pero me gustaría saber qué significa el Bautismo de Jesús para nosotros los cristianos puesto que él no tenía pecado. Porqué se bautizó Jesús? Amanda. México.

    ResponderEliminar
  3. Queridos amigos del blog:
    Que bonita esta homilia sobre el bautismo que nos ayuda a conocer y vivir mejor este sacramento. Recientemente mi marido y yo hemos sido padrinos de una criatura preciosa, y aunque no es la primera vez que soy madrina, nunca como esta vez hemos sido tan conscientes de la profundidad y sentido de este sacramento y ha sido principalmente porque los cuatro; padres y padrinos somos conscientes de lo que pediamos a la Iglesia para este niño, porque intentamos vivir cristianamente cada dia, y no se va quedar en un trámite más hasta el siquente sacramento, sino que nos hemos comprometido de verdad a que este niño viva y se eduque en la fe cristiana, dentro de la Iglesia y en el seno de una familia cristiana, que cuanda vaya creciendo a su alrededor respire aquello que en su Bautismo le marcó, pues para eso ya esta constituido para siempre: " sacerdote, profeta y rey".
    Que Dios te bendiga Pater por estas catequesis, y a todos por estar unidos en la oracion.
    Un abrazo, Eva.

    ResponderEliminar
  4. pazglez1936@gmail.com9 de enero de 2011, 12:57

    Hoy, a la par que el de Jesús,celebro, con gran júbilo,mi Bautismo.Desconozco la fecha, bien lo siento, pero, sí sé, que, a los cinco años en contra de las creencias de mi familia y por una muestra incalculable del Amor que Dios sentía por mi, fui hecha Hija de la Iglesia ( de Dios ya lo era), y de esa VIDA, viví,vivo y viviré.Cuantas Gracias en las desgracias, cuanta fuerza en la debilidad, y todo porque me quiere hasta morir-Hay quién dé más?-Paz

    ResponderEliminar
  5. Me uno al bonito comentario de Eva, teniendo presente que pronto se bautizará mi último nieto nacido el 23 de diciembre. La homilía de hoy nos servirá a la familia para recordar y reedescubrir el verdadero valor de nuestro Bautismo.
    El Bautismo de Jesús es una escena que recuerdo siempre con gran cariño y me hace gracia a mi misma el hacerlo siempre que me encuentro ante una "cola", ya sea de supermercado, del banco, de la pescadería...y es que el Hijo de Dios guardó cola pacientemente entre los que se acercaban a recibir el Bautismo de Juan. Y a menudo se lo recuerdo a alguien de mi familia que se impacienta mucho cuando ha de esperar y busca el medio que sea para evitar esa espera que lo desespera.
    Me inspira ternura ese Jesús humilde y paciente, que sin necesidad de ello, se bautiza-para que yo siga sus pasos y aprecie este sacramento-; lo mismo que permite que le claven en la cruz mis pecados, cuando Él no los tenía ni necesitaba pagar por nada...,y esto para que yo pudiese recibir la redención que Él me consiguió con Su muerte y resurrección y pudiese también unir mis sufrimientos a los Suyos, sintiendo en ello el alivio de Su presencia y cercanía al hacerse hombre, igual a nosotros - menos en el pecado-. Estas palabras de S. Pablo, cada vez que las vuelvo a leer o escuchar y me emocionan también me cuestionan sobre muchas de mis actitudes como cristiana que tienen como base la humildad y la sencillez;¡Misterio hermoso el de nuestra Fe!
    ¡Y que hermosa la Liturgia de la Iglesia con sus simbolismos y significados profundos!!
    Gracias, Pater.
    ¡Feliz semana a todos!

    ResponderEliminar
  6. ¡¡¡Que bonita catequesis!!! Agradezco que me recuerden cada paso que se da en el rito del bautismo, porque cuanto mas presente lo tengo, mas agradecimiento siento hacia Dios, Padre, Hijo, y Espíritu Santo; hacia la iglesia, hacia mis padres que pidieron este sacramento para mi, y me educaron según lo que prometieron en mi nombre.
    Es algo muy grande lo que ocurre a través de ese sacramento, la iglesia me acoge con la señal de la cruz, un signo que me acompañará toda mi vida, porque lo llevo impreso en mi corazón, y me recuerda que esa Cruz ha sido mi salvación, y signo de amor eterno de Dios hacia mi; será como un escudo que me proteje y me da seguridad, me acompañará en los momentos díficiles y me unirá a la pasión de Cristo, y me recordará que en la Cruz, el Señor nos dio la Vida, y vida eterna.
    Cada uno de los signos que se realizan, como muy bien nos explicas, nos prepara para que una vez convertidos en hijos de Dios y de la iglesia, estemos preparados para hacer frente a todo lo que se nos presente a lo largo de nuestra vida, son las armas que necesitamos para nuestra lucha diaria. "cuanto amor nos ha tenido el Padre".
    Señor concédeme vivir cada día mi bautismo, y recordar mi filiación divina, y la misión que como tal me has encomendado; por supuesto cuento con tu ayuda.
    Gracias Andrés, que el Señor te bendiga.
    Un abrazo a todos los hermanos.
    BEDITO SEA DIOS.

    ResponderEliminar
  7. Habitualmente no puedo responder a las cuestiones que se plantean en los comentarios por toda la carga de trabajo que tengo. Sin embargo, en este caso responderé a dos personas que han hecho sus comentarios por primera vez (creo) en el blog:
    1) Ciertamente no se trata de una homilía, sino de una catequesis mistagógica (explicación de los símbolos usados en la liturgia y su significado). No es propio de una homilía hacer esto, pero es que trato de dar una formación integral a las personas que me escuchan y leen, y fuera del ámbito de la Eucaristía no es posible. Por eso, aprovecho estos momentos para hacerlo. Pienso que, de otro modo, quedaría un hueco, que no se llenaría fácilmente.
    2) Sobre la pregunta de por qué se bautizó Jesús, si Él no tenía pecados, es lo mismo que, de otro modo, le plantea el mismo Juan Bautista a Jesús en el evangelio de hoy (Mt. 3, 14-15). La respuesta que da el mismo Jesús es que ésa es la voluntad del Padre. Las diversas explicaciones que se dan a este bautizo de Jesús son variadas y complementarias entre sí (a mi modo de ver): unos dicen que Jesús se bautizó para darnos ejemplo a nosotros y para que nos bauticemos también nosotros; ; otros dicen que así nos dio ejemplo de humildad a todos: si Él, que no tenía pecados se bautizó, cualquiera de nosotros no debe rechazar este bautizo (purificación-iluminación) en base a una pretendida santidad personal; otros dicen que Jesús se bautizó y de este modo santificó todas las aguas con las que los cristianos se bautizarían en adelante; otros ponen el acento en la manifestación del Padre con su voz y con la presencia del Espíritu y así estaríamos ante otra Epifanía (y no sólo la de los Magos) del Señor Jesús; etc.
    Un saludo

    ResponderEliminar
  8. ¡¡Precioso el video..un sacerdote con el Niño Jesús en brazos!!Me ha emocionado.
    Gracias por hacernos llegar de modo tan cercano y tierno la grandeza de Bautismo.
    Tantas veces me ha dado alegría el saberme partícipe de ese ser Rey,Sacerdote y Profeta del mismo Jesús...De ahora en adelante aparecerá ante mi esta escena, siempre que agradezca el ser bautizada, lo cuál hago a menudo.
    Gracias, Pater.

    ResponderEliminar