21-10-2012 DOMINGO XXIX TIEMPO ORDINARIO (B)
Queridos
hermanos:
El lema de este año para el Domund
es el siguiente: Misioneros de la fe
y el cartel del Domund es éste:
Vamos a profundizar un poco en este cartel y en su significado. Yo os digo
mis conclusiones, pero cada uno debe sacar las suyas:
1) El centro del cartel es la cruz de Jesucristo: Esa cruz en la que Él sufrió y entregó su
vida. Así, la segunda lectura dice de Jesús: “No tenemos un sumo sacerdote incapaz de compadecerse de nuestras
debilidades, sino que ha sido probado en todo exactamente como nosotros, menos
en el pecado”. Y de esta cruz y de esta entrega surge la salvación de los
hombres y también nace la fe de los creyentes. Pero fijaros que esta cruz no
está pintada de negro (el sufrimiento sin sentido) o de rojo (sangre dolorosa),
sino que es una cruz blanca (la blancura de la resurrección). Para resucitar
hay que morir primero, sí; pero la muerte no es un fin en sí misma, sino el
paso previo a la VIDA.
2) Hay unas manos pintadas de azul y verde: azul del mar,
verde de la tierra. Es la Tierra;
la nuestra; en la que vivimos; la que Dios nos ha entregado a los hombres. Esos hombres que habitamos esa Tierra
estamos llamados a acercarnos a esa cruz blanca, a Jesús, mediante la fe.
3) Esas manos son de
los misioneros. Ellos llevan a los hombres ante Jesús y ante su cruz
blanca, gloriosa, salvadora y, a la vez, ante una cruz de dolor y sufrimiento.
Dejadme deciros algunas cosas de los misioneros. Hablaré hoy sólo de los
misioneros españoles: - Hay unos 14.000 misioneros. – Un 54% son mujeres. - Entre
ellos hay unos 750 laicos, unos están solteros y otros casados, y éstos tienen
allí a sus familias (mujeres, maridos e hijos). - El 3% de los misioneros
tienen entre 20 y 40 años. – El 43% tienen entre 40 y 70 años. – El 54% tienen
entre 70 y 90 años. Como vemos por estas cifras, no es que se acabe la misión
de la Iglesia
española para llevar la fe a otras partes del mundo, sino más bien –creo yo–
que se está acabando un ciclo y un modo de hacer las cosas. Es cierto también
que hay otros españoles, mucho más jóvenes, que están en África, en
Latinoamérica, en Asia… como cooperantes de ONGs, pero éstos buscan un
bienestar material para las gentes; se trata de un trabajo solidario. Los
misioneros, sin embargo, buscan sobre todo llevar allá la fe de Jesucristo y
con ello el bienestar material y cultural.
Conozco varios misioneros. Ellos no son unos “supermanes”.
Son gente corriente, que se sienten impulsados por Jesús a llevar la fe en Él
por todo el mundo. Viven sus dificultades y miedos. Os leo a continuación un
trozo de una carta de una misionera española que estaba en África, en un país
de habla portuguesa, y que ha sido trasladada a otro lugar de África, pero de
habla inglesa. Me dice así: “Querido P.
Andrés ¡Paz y Bien en el Señor! ¿Cómo estás? He sabido que te han trasladado a la Cuenca Minera. Yo
estoy regular, con el inglés tan limitado que tengo, no puedo hacer todo lo que
quisiera, pero eso es también una
experiencia de pobreza. Cuando no se está donde una quisiera y como quisiera
entonces tengo la certeza de que estoy haciendo lo que Jesús me pide.
Pensaba hace unos días cuando estaba en la capilla, que yo, por mi
voluntad, me iría a donde estaba antes, pero luego me acordé de Sus palabras en
Getsemaní y Le dije que se haga Su voluntad y no la mía. Yo siempre decía que
una persona religiosa da la medida de su entrega cuando las cosas van mal,
porque cuando es fácil lo hace cualquiera ¿no? Bueno, pues ahora me ha tocado
demostrarlo y con la ayuda de Jesús quiero hacer lo que Él mismo me pide,
aunque me cueste mucho. Pide mucho por mí, Andrés, que lo necesito; ya te iré
contando cómo sigo”.
- El lema del Domund (Misioneros
de la fe) se inspiró en una iniciativa del Papa: el 11 de octubre comenzaba
en Roma el Año de la Fe. Este domingo pasado, 14 de octubre, se abría en la Catedral de Oviedo este
Año de la Fe en
nuestra Archidiócesis. El Papa ha escrito la carta apostólica “la Puerta de la Fe” explicando este Año santo.
La fe, toda fe de cualquier creyente ha de tener estos cuatro momentos: Un fe
que le debe ser anunciada; una fe que necesita nutrirse; una fe que debe ser celebrada
y orada, tanto a nivel personal como comunitariamente; y una fe que debe
ser testimoniada.
Vamos a coger algunas ideas del Papa Benedicto XVI[1], que
nos ayuden a profundizar en el lema del Domund:
1) La fe se alcanza
cuando alguien nos predica y proclama la Palabra de Dios. ¿Cómo va a surgir la fe en
estas parroquias de la UPAP
de La Peña si
nadie anuncia la Palabra
de Dios? Puede que mucha gente por aquí no quiera escucharla, pero seguro que
nadie la escuchará si nadie se la predica.
2) La fe se alcanza
cuando el corazón de los que escuchamos la Palabra se deja tocar por la gracia de Dios que
nos transforma.
3) Quien atraviesa
la puerta de la fe comienza un camino que dura toda la vida. El inicio de
este camino está en el bautismo y el final es el paso de la muerte a la vida
eterna. La fe no la podemos vivir solamente en el día de nuestro bautismo, en
nuestra 1ª Comunión, en nuestra boda, en nuestro entierro, en algunos entierros
o bodas de amigos y conocidos, en una visita al santuario de Covadonga. La fe
ha de ser vivida en cada instante de nuestra vida: en casa y en el trabajo, en
la parroquia y en la calle, en lo bueno y en lo malo, en las certezas y en las
dudas[2].
¡Que Dios proteja a
nuestros misioneros y nos conceda a todos vivir ese gran regalo de Dios, que es
nuestra fe!
[1] “Se cruza ese umbral (el de la puerta de la fe) cuando
la Palabra de
Dios se anuncia y el corazón se deja plasmar por la gracia que transforma.
Atravesar esa puerta supone emprender un camino que dura toda la vida. Éste
empieza con el bautismo (cf. Rm
6, 4), con el que podemos llamar a Dios con el nombre de Padre, y se concluye
con el paso de la muerte a la vida eterna” (Porta fidei, 1).
[2] Hay una frase preciosa del Papa en el documento Porta fidei sobre esta realidad: “Cuántos creyentes son probados también en
nuestros días por el silencio de Dios, mientras quisieran escuchar su voz
consoladora” (Porta fidei, 15).
Como todos los jueves espero ansiosa tu palabra .. esta la voy leyendo todos los dias hasta que domingo cierro mis ojos y te escucho .. Gracias Andres ..
ResponderEliminarEsta homilia es muy bella .. has estado en todos los detalles .. Sabes en mi epoca de juventud que fui misiones .. recuerdo las palabras del Padre Ancochea .. que nos decia ser misionero es llevar la luz .. abrir los caminos oscuros y mostrar la luz que nos da Cristo..para ello no deben imponer la fe ni la palabra .. con sus gestos .. con su ayuda .. con sus actitudes estan llenando de luz a quienes la necesitan y ellos seguro sentiran a Jesus en su corazon .. por mas que sea mas tarde ...
Yo creo que la fe nos llega cuando sentimos a Jesus en nuestro interior.. cdo sabemos que El esta alli y es alli donde debemos actuar .. con el ejemplo con el amor ..la caridad .. ..y comprendemos (por mucho que aveces nos cueste ) que si hacemos su voluntad .. sera para nuestro bien y del mundo y nos sentiremos en paz
Señor haz de mi lo quieras con tal que tu voluntad se cumpla ¡¡¡ frase del padre Ignacio Larrañaga ..
Un abrazo lleno de cariño y gratitud .. y otro abrazo a todos mis hermanos españoles ¡¡¡
Estimado P. Andrés
ResponderEliminar¡¡¡¡ Maravillosa homilía !!! El testimonio de está misionera me aporta muchas cosas, pues me reconozco con ella, que pobreza cuando sentimos que no podemos ayudar a los demas de la manera que nos gustaría. Pero la misericordia del Señor es infinita. A veces las palabras sobran, con un beso, una caricia, una mirada de ternura, un gesto, curan la soledad, se puede hacer más que con las palabras. Pido por ella, y por todos nosotros, para saber transmitir el Amor al Señor,a los que tenemos cerca.
Doy gracias al Señor, por todas las personas que puso en mi camino, pues en muchas ocasiones he sentido esto, amor, respeto, ternura,comprensión y ayuda.
Estoy segura que si aprendemos a escuchar la voz del Señor y seguirla con generosidad, uno no tiene que tener miedo a nada, sabe y siente que Dios está con él, con ella, que es Amigo, Padre, Hermano.
Gracias, P. Andrés, que ayuda a reconocer al Señor, a sentirle como una Persona que está cerca de mí y me " ama. "
Gracias, a toda la comunidad de las " once " por toda vuestra aportación.
Feliz semana para tod@s. ¡¡¡¡ Paz, oraciones, bendiciones. !!!!!
¡¡Hermosa homilía!! Que alegría encontrar la Palabra de Dios, cada jueves, al abrir el ordenador, son gracias muy especiales que nuestro buen Dios nos regala para llevarnos y llenarnos de Él y luego que nos hagamos misioneros de lo que llevamos dentro, de todos los que encontremos en nuestro caminar de cada día.
ResponderEliminarAl mirar la fotografía del cartel a primera vista, no me dice gran cosa, en cambio al leer y releer lo que nos vas diciendo a una se le ensancha el corazón, me encanta lo que nos dices de la cruz y que reflexión tan preciosa la del número dos. Que gozo el ver tantos hermanos, los misioneros, dispuestos a darse y a gastarse por los más desfavorecidos.
Sí, "domingo día del Domun, día de las Misiones, recordamos con cariño y gratitud a los miles de misioneros y misioneras, de cooperantes y voluntarios. Han renunciado a una vida cómoda para marchar a otros países y ayudar a personas necesitadas tanto en el aspecto espiritual como en el material.
Ellos representan lo mejor que tenemos en la Iglesia y se ofrecen en favor de la humanidad más desvalida, imitando a Jesús siervo humilde que vivió para todos. Es un buen día para acordarnos de ellos, dar gracias al Padre, que impulsa su vocación, PRESTARLES LA AYUDA QUE PODAMOS E IMITARLOS EN SU ACTITUD DESPRENDIDA".
“Más de la mitad de los misioneros tienen entre los 70 y 90 años” ¡madre mía! eso si que es de admirar ¡menuda lección me están dando! Al pensar en ellos, pienso que voy a tener que dar muchas cuentas a Dios al final de mis días.
Como comprendo a esa hermana misionera, eso de sentir la necesidad de aportar, de dar, de colaborar, de hacer y no poder por distintas limitaciones es terrible la impotencia que uno siente, la tendré presente en mí humilde oración ante el buen Dios.
Un abrazo para todos y os deseo una buena semana.
Gracias por la explicación tan bonita y acertada que nos has dado del cartel del dia del Domund,Pater. Tengo tanto que aprender.. porque al mirarlo expuesto en varios lugares, ni me paré ni le di sentido alguno, por hacerlo con prisa; lo miré por alto. Ha sido tu homilía la que me ha hecho meditar y orar, ante el ordenador al abrirlo, desde esas manos que se ofrecen y ofrecen ante la Cruz resucitadora nuestro mundo, tan necesitado de salvación y del anuncio del evangelio.
ResponderEliminarTambién mis manos quieren hoy ofrecerse y ofrecer...También yo, igual que tantos misioneros he recibido la misión de Jesús, de anunciarle en mi ambiente y con mis pobres medios.Lo que voy recibiendo, qué menos que ir dándolo gratuitamente, tal como me lo han entregado.
¡Cuánto bien puede hacer una imagen!
¡Qué pena no poder ver en video tu exposición del Cartel en la Peña! Hoy no podré acercarme.
Gracias.
Buén día misionero para todos, amigos.
A todos los del blog, a los de "La comunidad de las once y los de las Eucaristías de la Peña y demás parroquias que Andrés acompaña, gracias por vuestra participación activa y por los comentarios en el blog, aunque tengo que reconocer que hace varios domingos que no los leo y sé que son aportes muy valiosos.
ResponderEliminarGracias Andrés por ayudarnos a crecer en la FE A TRAVÉS DE LA ORACIÓN y de tus palabras. De tantos elementos valiosos de tu homilía de hoy me quedo con: "Quien atraviesa la puerta de la fe comienza un camino que dura toda la vida..." y sé que en este camino tenemos dificultades, tristezas, luchas, alegrías, aciertos y crecimiento en el amor a Dios y a los hermanos.
Hoy día tan especial del DOMUND, me uno a todos los misioneros del mundo (Sacerdotes, Religiosas(os), Laicos, niños jóvenes) para que anunciemos la buena noticia de Jesús, que Él nos ha confiado.
Hoy con los niños de la catequesis reflexioné y canté con ellos: "Por el norte, por el sur, por el Este y el Oeste, por todo el mundo, anunciaré el mensaje de Jesús. Esto lo deseo para todos vosotros mis amigos de Asturias los que conozco y los que sintonizan con las homilías de Andrés.
A todos los del blog, a los de "La comunidad de las once y los de las Eucaristías de la Peña y demás parroquias que Andrés acompaña, gracias por vuestra participación activa y por los comentarios en el blog, aunque tengo que reconocer que hace varios domingos que no los leo y sé que son aportes muy valiosos.
ResponderEliminarGracias Andrés por ayudarnos a crecer en la FE A TRAVÉS DE LA ORACIÓN y de tus palabras. De tantos elementos valiosos de tu homilía de hoy me quedo con: "Quien atraviesa la puerta de la fe comienza un camino que dura toda la vida..." y sé que en este camino tenemos dificultades, tristezas, luchas, alegrías, aciertos y crecimiento en el amor a Dios y a los hermanos.
Hoy día tan especial del DOMUND, me uno a todos los misioneros del mundo (Sacerdotes, Religiosas(os), Laicos, niños jóvenes) para que anunciemos la buena noticia de Jesús, que Él nos ha confiado.
Hoy con los niños de la catequesis reflexioné y canté con ellos: "Por el norte, por el sur, por el Este y el Oeste, por todo el mundo, anunciaré el mensaje de Jesús. Esto lo deseo para todos vosotros mis amigos de Asturias los que conozco y los que sintonizan con las homilías de Andrés.
Hoy en La Peña, D. Andrés nos habló de las Misiones, de testimonios preciosos de servidores del Evangelio en tierras lejanas, de cómo la Fe es un dón recibido del Señor desde nuestro Bautismo, y como tal en la vida, hay que alimentarlo constantemente con obras. Emociona ver que hombres y mujeres de edad avanzada, permanecen fieles al servicio de Señor, impartiendo su mensaje lejos de su país, de su famila, de sus amigos, sin medios económicos... Esta renuncia a si mismos, es como un bofetón para nuestras vidas, más cómodas, más familiares, con nuestros e-mails, nuestros amigos, nuestros "cacharritos", como llama D. Andrés a todas esas cosas que adquirimos muchas veces inútiles, y que terminan en home.
ResponderEliminarAmigos, también D. Andrés está en misión, lo hace con entusiasmo juvenil, está recibiendo ya el cariño de su nueva feligresía. Le gusta comenzar a recibir en el Confesionario, es uno de sus lugares predilectos, me hace recordarme de las colas de otro confesionario, en un lugar de cuyo nombre no quiero acordarme...
El Templo de La Peña se está llenando, y vendrán más fieles, ya somos sus feligreses y la Comunidad de las 11 perfectamente ensamblados, ellos nos reciben con cariño, y nosotros correspondemos igualmente, ellos no saben, que éramos nosotros los que estábamos más solos, más desamparados, y que sus manos tendidas para recibirnos, las cogemos con el agradecimiento en nuestros corazones, me gustan sus caras, y las damas del coro, es todo tan lindo..., tan normal, tan real..., y tan humilde, tan sano...
Que el Señor le bendiga D. Andrés, por su trabajo y su misión evangelizadora permanente, y a todos mis querdios hermanos del blog, de la Comunidad de las 11, y a los feligreses de la Peña, que me consta que ya entran en el blog.
Feliz y santa semana para todos.
Aloya.
Aquí estoy otra vez, lo siento amigos pero no puedo evitarlo....es tanta la ternura que percibo en el audio de esta homilía, que me ha rebosado las manos y el corazón. No sé quien derrama mas ternura, cariño, simpatía y Fe, si nuestro Pater o sus queridos feligreses de la Peña. ¡¡Qué anuncio tan hermoso, Pater!!
ResponderEliminar¡¡Qué hermosos son los pies de los que anuncian el evangelio!! Cuando lo hacen con ternura, acogida y bondad.
Qué testimonios tan bonitos hemos podido escuchar. ¡Esta es una Buena Noticia! Cuántos esperando con el corazón abierto, que el Señor aumente su Fe!! Ciertamente: - “La fe se alcanza cuando alguien nos predica y proclama la Palabra de Dios.” Y si ya la teníamos, crece y crece.Y tan cierto como esto es que: “La fe se alcanza cuando el corazón de los que escuchamos la Palabra se deja tocar por la gracia de Dios que nos transforma.” Al escuchar la homilía hemos casi “sentido”, cuántos corazones han sido tocados, en la Peña y a través del Blog, por la gracia de Dios.
Bendito sea Dios.
Lo siento Chony, te he quitado tu frase…pero había que volver a bendecirle una y otra vez, por cuánto hace en nosotros.
Os dejo esta frase preciosa que me enviaron hoy de S. Agustín:
"El hace que desees, y Él es lo que deseas." Y esto Por la Fe.
Buena semana para todos, amigos.
¿Desde cuando tienes fe?.
ResponderEliminarCon esta pregunta rondándome en la cabeza salí el domingo de la Iglesia y después de reflexionar un poco, creo que estoy en condiciones de responder.
Yo nací en una familia que no es especialmente prácticamente, sí creyente, pero la práctica religiosa es más bien tibia, tirando a fría. Es decir, yo no tengo el recuerdo de ir a Misa los domingos por imperativo familiar. Estudié en un colegio religioso pero tampoco recuerdo un marcado espíritu religioso, los ejercicios espirituales eran una buena excusa para ir mar tarde al colegio y hablar de temas de actualidad.
Sin embargo, puedo decir que tengo Fe y que ésta va madurando con el tiempo gracias a los testimonios de vida con los que fui creciendo. Tengo el recuerdo que en mi casa se le daba de comer a un señor, cada cierto tiempo, que mi madre decía pobre y debía de ser “muy” pobre porque a nosotros no nos sobraba nada, más bien al contrario, eso me impregnó la idea de compartir, de repartir, de ver al prójimo como hermano.
Más adelante he tenido la suerte de toparme en la vida con personas que fueron ejemplos de Fe viva, Fe de la buena, nada de teorías. Fe de creer en Dios hasta el abandono, de “Señor, me pongo en tus manos y hágase tu voluntad”. Fe de seguir al pie de la letra mandatos evangélicos, “que no sepa tu mano derecha…”, de tratar a todo el mundo por igual sin tener en cuenta posición social ni creencias, de darse a los demás disfrutando, de celebrar cada minuto del día porque es un regalo de Dios. Podría ir desgranando muchos mas ejemplos pero creo que se me entiende lo que quiero decir.
Bueno, pues eso fue lo que hizo que yo tenga Fe y que esté agradecida de tenerla. Esos ejemplos de vida fueron los que me dijeron que hacer eso era bueno y que ese actuar estaba sustentado en Alguien y en Algo que no falla y que es el pilar de la vida, que a veces te parece que se tambalea, pero es sólo eso “un parecer” porque sin ella no soy nada. Es la única agarradera en momentos difíciles pero también en los fáciles. Verdad es el canto de “señor, me has mirado a los ojos y sonriendo has dicho mi nombre”, yo así lo siento y me gusta que así sea.
Un abrazo para cada un@
Hace 45 años ingresaba a una Congregación Misionera, era muy joven, para enterarme lo que esto suponía, solo sabía por mis tíos y mi abuela con quien vivía, quienes eran los misioneros, a que se dedicaban y donde iban.
ResponderEliminarEn estos 45 años he estado durante muchos años en lugares de misión en mi propio país, donde la pobreza, la violencia, la marginación existía y aun sigue existiendo en mayor o menor escala
Me tocó pasar noches escondida en un cuarto pequeño con el sacerdote de la parroquia y mis hermanas de comunidad para que no nos alcanzaran los proyectiles, de los enfrentamientos que tenían la guerrilla de las FARC y los paramilitares.
Trabajaba como enfermera atendiendo partos y asistiendo a los enfermos de todo tipo porque los médicos que llegaban a la región eran los que salían de la universidad de Bogotá a hacer su año de práctica y muchas veces llegaban y rápido se marchaban por miedo y por lo malo que era el clima. Pues había mucha malaria.
También estuve trabajando internados (Hogares Juveniles Campesinos) y en colegios como secretaria. Al ejercer mi labor en estos campos sabía muy bien que la misión implicaba el AMOR, LA ENTREGA, EL CARIÑO Y LA RESPONSABILIDAD del trabajo encomendado en los niños, jóvenes y personas adultas.
La gente estaba ansiosa del mensaje de la Palabra y de Dios, de los sacramentos. Hoy es más difícil, porque la crisis no es solo económica, es de pérdida de valores y veo que la misión que el Señor me ha encomendado ahora en este tiempo no es en un país del TERCER MUNDO como en otros tiempos se decía de Sur América, África, etc.etc. La misión hoy es aquí en España donde en semana solo estamos las 4 religiosas y alguien más cuando hay una misa de funeral, aniversario etc. etc.
A la catequesis en este momento asisten 13 niños, mientras hacen la primera comunión, que es todo un acontecimiento tristemente “social” porque se celebra con mucho lujo, fotos, gastos de toda índole y de los 6 niños que hicieron la primera comunión el curso pasado ya no se les ve ni a ellos ni a sus padres por la parroquia.
Si, es aquí con mi entrega, con mi compromiso, en mi vida de comunidad, en el trabajo de la guardería y en la parroquia es donde Dios me llama a hacer lo que Él me pide SER UNA VERDADERA MISIONERA.
Gracias a Dios por este Regalo que ha dado, la Fe y mi vida Consagrada.
Un abrazo.
Olga
La pregunta del millón, nos ha recordado nuestro/a, amigo/a de la @.blog..., escuchada a D. Andrés en el audio de la homilía.
ResponderEliminar"¿Desde cuando tienes fe?"
Me ha llevado a hacer un recorrido por mi Fe. Fe del Jesusito de mi vida, Fe heredada de unos padres/abuelos, Fe del colegio, Fe que ha ido madurando y he personalizado, haciéndola mía; Fe. Maravilloso regalo. Por la fe, nuestro amigo/a @.blog nos ha hecho desear, al menos a mi,esa mirada sonriente de Jesús que nos busca, porque nos ha elegido y nos llama por nuestro nombre.Así deseso vivir hoy este día, llena de Fe, sabiéndome mirada por quien da sentido y respuesta a toda mi vida.
Gracias por tu idea amigo/a@.blog
Buen día para todos.
¡Hola amigos!
ResponderEliminarAquí estoy de nuevo con vosotros porque os quiero informar de una gran oferta, una oferta en donde pagan el ciento por uno y no veáis la de cosas buenas, que vamos descubriendo y aprendiendo, en relación con los demás y con nosotros mismos, y nos hace sentir envueltos en una paz, una alegría y una ternura que sólo Él sabe dar ¿que os parece? ¿A qué es maravilloso?
“Veréis: se necesitan adoradores para la Adoración Eucarística de Oviedo.
“Capilla de las esclavas C/Toreno Oviedo”. Sabéis que esta capilla esta abierta interrumpidamente durante las 24 horas del día, es necesario que, al menos, haya siempre una persona presente y si son dos mucho mejor.
Dedicarás una hora semanal acompañar al Señor en día y hora fijos.
En ocasiones el adorador inscrito no puede asistir por motivos justificados, por lo que se requiere la asistencia de un sustituto. Hay las dos acciones.
Para más información: www.adoracionperpetuaoviedo.info
¡¡¡Anímate!!! No te arrepentirás Si te decides acabas de hacer la mejor de las elecciones” Eres un privilegiado. La adoración es un don un regalo que Dios nos concede porque nos ama.
El tema que Andrés desarrolló en la homilía escrita, me había llegado al corazón de una forma muy especial, pero al escucharlo en La Peña ¡uf! la sacudida fue más fuerte. Hubo varias cosas que me impactaron pero me voy a detener en una: ¿desde cuando tienes fe? En ese momento pensé en mi madre, ella fue la que plantó la semilla en mi corazón y la cultivó los nueve años que me tuvo con ella. A mí me pasó lo mismo que al anónimo del comentario del 22-10 de las 09:00, salí de misa dándole vueltas a la pregunta y sigo reflexionándola y dando gracias a Dios porque, a pesar de llevar con Él a nuestra madre siendo los ocho hermanos muy pequeños, a lo largo de los 65 años, el Señor siempre me fue poniendo personas que me han ayudado a alimentar, a nutrir esa semilla de la fe que mi madre había plantado en ni corazón.
Hoy quiero darle al Señor, las gracias por el don de la fe,gracias de una manera muy especial por la primera misionera que plantó la semilla, gracias por ponerme en mi camino a tantas personas misioneras, que me han ayudado y me siguen ayudando a nutrirme, a celebrarla y orarla. Que el buen Dios os bendiga a todos y los que partieron de este mundo que los tenga en su glaria.
Un abrazo.
Buena oferta la de María...muy buena. La pensaré. Gracias.
ResponderEliminarDesde siempre he tenido fe, pero hasta hace muy poco no me di cuenta de que la fe era un gran regalo de Dios.
ResponderEliminarMe sentía muy a gusto con mi fe, era muy cómoda: cuando las cosas me iban bien, rezaba dando gracias a Dios (a veces se me olvidaba) y cuando iban regular, rezaba pidiendo ayuda. El problema fue cuando las cosas fueron muy muy mal, y descubrí que mi fe era superficial ,y que me faltaba algo.
Tuve suerte, recé y Dios me hizo otro gran regalo: puso en mi camino a D. Andrés, para que me ayudara a profundizar en la fe, a cuidarla, mimarla, fortalecerla, abrir mi corazón y dejarme tocar de verdad por Dios.
Ahora, doy gracias al Señor por la fe, le pido que me la aumente , pero sobre todo, le pido que se la regale a mis hijos, y que ellos le abran su corazón.
Muchas Gracias Andrés.
Un abrazo
Sois fantásticos,pero ¡qué comentarios tan preciosos salen de vuestros corazones!
ResponderEliminar¡¡Gracias!!
que Dios os bendiga a todos. También a ti, pater.
Buena semana, esperando la homilía de mañana....