jueves, 5 de diciembre de 2013

Inmaculada Concepción (A)



8-12-2013                               INMACULADA CONCEPCIÓN (A)
Gn. 3, 9-15.20; Slm. 97; Ef. 1, 3-6, 11-12; Lc. 1, 26-38
Homilía en video. HAY QUE PINCHAR EN EL ENLACE ANTERIOR PARA VER EL VIDEO. Homilía de audio en MP3
Queridos hermanos:
Celebramos hoy la festividad de la Inmaculada Concepción, que significa que la Virgen María fue concebida en el seno de su madre Ana sin que tuviera el pecado original. Su definición como dogma tuvo lugar en 1854.
- En la primera lectura se nos narra una parte de la historia de Adán y Eva. Cuando Dios descubre que ellos habían comido del árbol prohibido, se establece un diálogo entre los tres. Adán se ve descubierto y echa la culpa a Eva diciendo: “La mujer que me diste como compañera me ofreció del fruto y comí”. Pocas líneas más arriba Adán, refiriéndose a Eva, había dicho: ¡Esta sí que es hueso de mis huesos y carne de mi carne! (Gn. 2, 23). Es un piropo precioso. Pero ahora ya empieza el hombre a machacar a su mujer: ‘“La mujer que me diste como compañera”, porque me la diste tú (se refiere a Dios), que yo no te la había pedido’.
Hace pocos días se celebraba en todo el mundo el día internacional contra la violencia de género. Hubo una conferencia en la casa de la cultura de Tapia de Casariego y fue muy interesante. Se dijeron cosas muy interesantes:
* Se dijo que habitualmente esta violencia la padecen las mujeres por obra de sus maridos o parejas, pero también la sufren algunos hombres a manos de sus mujeres.
* Se dijo que, hasta hace poco, esta violencia la padecían personas de veinticinco años para arriba, pero cada vez más la están padeciendo los adolescentes en sus relaciones sentimentales.
* Se habló de la violencia de alta intensidad, que es la que conlleva la agresión física y hasta la muerte, pero también se habló de la violencia o maltrato psicológico, el cual es mucho más común de lo que se piensa. Expresiones como ‘cállate la boca’, ‘¿qué sabrás tú?’, ‘eres una inútil’, o el control del dinero que gasta el cónyuge, o el control de las llamadas telefónicas, o el control de la ropa que se pone, o el prohibir que trate con vecinos, con amigos o con los propios familiares… son algunas de las formas de este maltrato psicológico, que está presente en bastantes matrimonios, o parejas de hecho, o novios.
* Se habló de la importancia de que los familiares y amigos, al menor signo de maltrato, procuraran actuar antes de aquella situación fuera a más y para cortar de raíz aquellos comportamientos.
Cuando Adán le dijo a Dios ante Eva: “la mujer que me diste como compañera”, en estas palabras había una acusación, un distanciamiento de corazón y una humillación de Adán contra Eva. Era como si Adán le dijera a Dios: ‘ESA que me diste tú, porque yo no te pedí’. Con lo cual, la culpa de que Adán comiera el fruto del árbol fue de ‘aquella cosa’ (Eva) que tenía a su lado o del mismísimo Dios que se la había puesto allí, pero de lo que estaba seguro Adán es que la culpa no era suya. En estas dos cosas se distingue a un maltratador: 1) en que acusa a los demás de todo lo malo que suceda, e incluso de lo todo lo malo que haga él mismo, y 2) en que la culpa no es nunca suya.
- Alguien podrá preguntar que por qué saco este tema del maltrato a colación en la Misa y, además, en la mismísima fiesta de la Inmaculada Concepción. La respuesta es la siguiente: quiero mostrar de alguna manera la diferencia entre el modo de actuar de Dios y del ser humano. Éste puede maltratar a sus semejantes, mientras que Dios nunca lo hará. Lo vemos claramente en el evangelio que acabamos de escuchar. Hemos oído cómo Dios trata y dialoga con una mujer: con la Virgen María. Vamos a analizarlo un poco más de cerca:
* Dios, a través del ángel Gabriel, saluda a María con un profundo cariño: “Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo; bendita tú eres entre las mujeres”. No es que Dios trate de engatusar a María o le haga la corte. Simplemente Dios le dice la verdad: que está llena de gracia y sin pecado desde el mismo momento de haber sido concebida y que sigue sin pecado; que Dios está muy cerca de ella y que es amada por Él; que va a ser la mujer más piropeada de todo el mundo… Pero estas palabras de Dios y este comportamiento suyo hacia María no es algo que sólo se dé al principio y, cuando ya esté segura, entonces la tratará de cualquier manera. NO. Dios trata a la Virgen María siempre igual: lo mismo al principio, que al medio, que al final. Dios también nos trata a nosotros siempre igual. Dios no es como nosotros, que lo que decimos hoy puede ser distinto de lo que decimos mañana, que lo que hacemos hoy puede ser distinto de lo que hacemos mañana.
* Un poco más adelante el ángel Gabriel, de parte de Dios, le dice: “no temas, María”. Dios da seguridad a María. Dios la protege y la acompaña. Dios no machaca la autoestima de María. Uno de los mayores daños (a mi modo de ver) que causa la violencia de género es que, la persona de la que uno debía de esperar amor, protección, cariño, seguridad, comprensión, paciencia, ayuda para crecer interiormente, alegría…, se convierte por ese maltrato en el mayor enemigo, en el que produce terror y un destrozo completo de la personalidad. Pues bien, con estas palabras: “no temas, María”, se expresa toda la delicadeza de Dios para María. Ella pudo haber quedado amedrentada ante la aparición de un ángel y ante el mensaje de Dios y Éste quiere tranquilizarla y darle seguridad. ‘“No temas, María”, pues conmigo estás segura y nada malo te va a suceder’.
* ¿Tuvo éxito Dios en su trato cariñoso y cercano con María? SÍ. Sabemos que la respuesta es afirmativa, porque María ya habla sin miedo ni temor con Dios y le pregunta cómo va a suceder el embarazo que le anuncia el ángel. María habla con confianza e incluso menciona cosas íntimas y de su sexualidad. Los temas de sexualidad son muy personales y uno no los va comentando con cualquiera. Sin embargo, María ya sin miedo pregunta: “¿Cómo será eso, pues no conozco varón?” Y a continuación María, ante la respuesta de Dios, acepta cumplir su voluntad. ¿Qué conclusión podemos sacar de todo esto? Pues que se consigue más de los hombres con cariño y comprensión que con miedo, que atrae más moscas una gota de miel que cien barriles de vinagre.
Aprendamos, como decía antes, del trato que Dios da a los hombres para también hacerlo nosotros con nuestros semejantes. Si lo hiciéramos así, no habría ninguna violencia de género. ¡Seguro!

8 comentarios:

  1. En estos días celebramos nuestro aniversario de casados ,ya son 41 sigo dando gracias a dios por haber puesto en mi camino a ésta persona.después de tanto tiempo sigo muy enamorada de el siento su protección ,su cariño su apoyo su ayuda,para seguir creciendo como persona.ahora con la jubilación tenemos más tiempo.para estar juntos y juntos poder ayudar y trabajar por y con los demás
    Todos los días doy gracias por todo ello

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  2. Al leer la homilía de hoy me iba sonriendo por lo bajini por lo bien que reflejas algunos comportamientos.
    Me vienen a la cabeza esas reflexiones tan prácticas y reales de que cuando todo va bien, ¡¡¡¡perfecto!!!. Pero cuando algo se tuerce… entonces la cosa cambia.
    Aquello de “que bien hemos educado a nuestros hijos” y cuando algo sale mal: “es que ese hijo tuyo es un zángano, o un….”
    Qué verdad es que pasamos del te quiero, te adoro, te compro un loro, al… ¡ala! ahí va la vaca burra metiéndose en los charcos!!!

    Qué bueno sería mantener un equilibrio tal que nadie ni nadie nos hiciera cambiar en cuanto las cosas importantes de la vida.
    Yo, al menos, no lo consigo y sufro por ello, yo soy mi propio maltratador ya que con demasiada frecuencia paso de la pena a la rabia y me culpo por ello.
    Tan pronto justifico el comportamiento de una persona achacándolo a que esa cabeza no está bien y al minuto siguiente y por un hecho parecido me pongo hecha una foca.

    Ya se, querido cura de Tapia, que tengo tarea por delante.
    Fructífero Adviento!

    Un abrazo para cada un@





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  3. Buenos días .eres genial,Andrés como,has enganchado este día tan lindo que es el día de nuestra Madre con el día de la violencia de género ...que es algo muy feo y que lamentablemente cada vez se ve más ..en todo extracto social y lo que es muy triste también es que cada vez son más jóvenes .....que equivocado tienn el camino Dios mío ...si actuáramos así como tu nos dices
    Aprendamos, del trato que Dios da a los hombres para también hacerlo nosotros con nuestros semejantes. Si lo hiciéramos así, no habría ninguna violencia de género. ¡Seguro!
    Seguro que viviríamos con paz en el corazón ... Respetándonos los unos con los otros ....
    Como siempre agradezco tu palabra ....
    Un abrazo

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  4. La delicadeza, el discernimiento de D. Andrés para comprender los temas humanos, los temas de la realidad de la vida y para relacionarlos con la trascendencia y la espiritualidad. Cómo nos muestra en el día de la Inmaculada Concepción un asunto tan arduo y penoso, -y por desgracia bastante frecuente-, como es el de la violencia de género. Cómo expone claramente sus características para terminar con la comparación de la Anunciación a María por el ángel Gabriel y la conversación, el trato de Dios con Ella. Frente al daño en la autoestima y la personalidad, el Amor que ayuda a crecer interiormente y a creer en nuestra dignidad. Tenemos una imagen de la Virgen de la Esperanza muy bonita en la parroquia de San Francisco de Asís en Oviedo y a veces le digo: “Eres Tú la que me inspira en los problemas de los derechos humanos, la que me dice donde se encuentra la dignidad”.., la mía y la de los demás.

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  5. Si es cierto que suena un poco raro el escuchar en este día de la Inmaculada hablar de la violencia de género, pero no es menos cierto que es la forma de llevar el Evangelio a la vida, y la vida al Evangelio. No en vano D. Andrés en su homilía, nos muestra las distintas formas de amar, como "amamos" nosotros los hombres, y como lo hace Dios.
    Parece que cada día vemos mas claro el gran egoísmo que impera en las relaciones de pareja, matrimonios, noviazgo etc. se ve con demasiada frecuencia que consideramos al otro como una propiedad, la cual pasa a ser esclava de sus deseos y caprichos, no se valora nada de lo que hace, ni tampoco como persona, pasa a ser "algo" que tienes ahí, para cuando te apetece prestarle atención, y cuando no, ha de guardarse muy mucho de pensar y actuar por su cuenta.
    De que distinta manera actúa el Señor con nosotros, ya vemos como se dirige a la Virgen María, cuanta delicadeza y ternura, como valora su forma de comportarse, como le da toda la libertad del mundo; así ella, se da, se entrega, y se abre confiada y serena, a sabiendas de que puede confiar; ahí está su Fíat, su hágase.
    Vemos en los Evangelios, la gran finura, el gran cariño con que Jesús se dirige siempre a las mujeres; tenemos a Mª Magdalena, a la adúltera, la samaritana etc. etc.
    Purísima Virgen María, ruega por nosotros, para que tu divino hijo nos conceda la gracia de saber tratar a nuestros semejantes, con amor y respeto, poder llevar siempre en el rostro una sonrisa, que les indique mi deseo de estar cercana, de poder escuchar pacientemente; también te ruego me concedas tener un corazón humilde, que nunca se sienta superior a nadie; y por favor concédeme amor, mucho amor para poder regalar a todo aquel que se acerque a mi.
    Bendita seas Madre.
    Que también Ella nos conceda a todos saber preparar nuestro corazón para la llegada de nuestro Salvador, y saber estar siempre en vela esperando ese momento.
    Muchas gracias Andrés.
    BENDITO SEA DIOS.

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  6. Me parece muy oportuno que en la homilía se haya tocado el tema de la violencia de género. A muchos de los que la hemos leído o escuchado, no se nos hubiera ocurrido ir a la conferencia, pensando que nada tenía que ver con nosotros, y luego nos hemos sentido identificados con alguno de los puntos que se han expuesto.
    No se si se considera violencia de género el machismo en general. Las mujeres de mi edad y mayores, lo hemos padecido en nuestras familias.
    A mi me tocó "servir" a mi hermano mayor, porque en mi casa era impensable que él tuviera que hacerse sus cosas. Lo peor es que mi hermano, para justificar su egoísmo,(porque al final el machismo no es más que eso), actuaba como si yo no valiera nada, mientras que él era una persona muy importante y muy ocupada. No hace falta estar casada para que te menosprecien.
    Por supuesto, después de tantos años, mi hermano sigue pensando que lo hizo todo bien.

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  7. Me parece muy acertada como siempre, esta Homilía de D. Andrés, especialmente tomando como referencia la festividad de la Inmaculada Concepción. No es fácil ni frecuente que un sacerdote hable desde un púlpito sobre el tema del maltrato de género, y si lo hace es de forma convencional.D. Andrés, da como siempre un paso más allá, y retoma ese diálogo de Adán con Dios, preludio de todos los sinsabores que pasaríamos la humanidad, y nos pone de manifiesto muchas cosas, desde la vida cotidiana con sus frases desafortunadas y el "tonito" con que se dicen y que tanto hieren, hasta el maltrato puro y duro, tanto psicológico como físico, ya sean las víctimas hombres o mujeres, esta lacra la sufren ambos sexos.
    Gracias Andrés por hablar con tanta delicadeza y contundencia sobre el tema, me ha emocionado y me ayuda a comprender mucho mejor el problema, a conocer las finas aristas que bordean estas tremendas situaciones y cómo pueden estar perfectamente disfrazadas de intrascendencia, cuando en realidad son una crueldad, es algo parecido a las cuchillas de esa frontera impensable de nuestro país con Africa, por muy suave que se toquen, siempre se sale herido. La Homilía de D. Andrés, es una ayuda impagable y una contribución extraordinariamente esclarecedora para proteger a la sociedad maltratada.

    Que el Señor le guíe siempre, creo que cada día irradia Vd. más paz y más luz, está claro que Dios sabe escoger siempre a sus elegidos.

    Un fuerte abrazo para Vd. y para todos los hermanos del blog.

    solideo negro.

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