Gracias por estas cuatro homilías semanales. Me hacían falta. Me han sentado muy bien, estaba famélica espiritualmente.
Estoy podando el miedo de mi vida porque me está haciendo mucho daño. Vivo con un miedo que me atenaza y no me deja ser yo, me coarta y me quita libertad. Pero poco a poco lo voy a conseguir, se que desterraré el miedo de mi vida. Pese a esto disfruto de la alegría de sentirme querida y elegida.
¡¡Qué bonita la lectura del breviario! Me sonaba mucho y al buscarla volví a releer la Carta a Diogneto sobre los Cristianos en el mundo. La coherencia entre su vida y su fe,es palpable; algo que nos puede faltar hoy en día cuando nos asombramos de no estar trasmitiendo la fe a los hijos o a nuestro alrededor. Estos cristianos simplemte seguían a Jesús, vivían el Evangelio.Es facil ver, que a nosotros nos falta algo..
Querido cura de Tapia,
ResponderEliminarGracias por estas cuatro homilías semanales. Me hacían falta.
Me han sentado muy bien, estaba famélica espiritualmente.
Estoy podando el miedo de mi vida porque me está haciendo mucho daño. Vivo con un miedo que me atenaza y no me deja ser yo, me coarta y me quita libertad. Pero poco a poco lo voy a conseguir, se que desterraré el miedo de mi vida.
Pese a esto disfruto de la alegría de sentirme querida y elegida.
Un abrazo, amigo.
Un abrazo para cada un@
¡¡Qué bonita la lectura del breviario! Me sonaba mucho y al buscarla volví a releer la Carta a Diogneto sobre los Cristianos en el mundo. La coherencia entre su vida y su fe,es palpable; algo que nos puede faltar hoy en día cuando nos asombramos de no estar trasmitiendo la fe a los hijos o a nuestro alrededor. Estos cristianos simplemte seguían a Jesús, vivían el Evangelio.Es facil ver, que a nosotros nos falta algo..
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